
Revueltas en la mar del pensamiento
se ahogan al hundirse las ideas,
algunas las arrojan las mareas
y quedan a merced del aislamiento.
La paz, es ese credo, que del viento
usurpa libertad y con correas
al mundo moverá con sus poleas,
resuelta a fenecer en el intento.
Dejando las rencillas al pasado
hagamos a la paz un nuevo templo
de culto popular y consagrado
al nuevo amanecer que ya contemplo.
Es claro mi mensaje aquí plasmado
Te toca responder con el ejemplo.
El Armador de Sonetos.
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