
En punto de las dos exactamente
vestida con organza y lentejuela
de porte majestuoso, con cautela
desfila por la alfombra muy sonriente.
Deambulan mis recuerdos por su mente
conmigo fue feliz y se consuela
y al verla transitar la pasarela
mi lágrima brotó tan de repente.
Espero que la vida me permita
en cosas del amor volverme ducho
no quiero que la escena se repita
quedando mal parado por blanducho.
Con besos en la frente me musita:
“Papito”, de verdad te quiero mucho.
El Armador de Sonetos.
2 comentarios:
Hermosísimo poema querido amigo. Es poesía que atrapa dejándonos pensativos después de ese deleite que nos produce el leerla. Siempre doy mi vueltecita por aquí en busca de algo nuevo y naturalmente puedo afirmar que lo encuentro. Un abrazo sincero y cuídate mucho.
Tocayo:
Muchas gracias por pasar a dejar
tu cálida huella por mis humildes letras.
Saludos cordiales.
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